Conozca los fundamentos de una excelente comida española y obtenga inspiración para su menú.
La cocina tradicional española es conocida por ser un asunto humilde, que consiste principalmente en cultivos locales y productos de la región. Son increíblemente ricos y a menudo repletos de sabores densos, y cuentan con una increíble variedad debido a las grandes diferencias geológicas.
El clima cálido resulta muy útil para cultivar aceitunas durante todo el año, por lo que no es de extrañar que el aceite de oliva se utilice a menudo para cocinar. Dado que España se encuentra en la costa, el pescado y el marisco son también parte habitual de su cocina. Además del pescado, los embutidos son una de las opciones más populares para acompañar casi cualquier plato. Los españoles también son especialmente aficionados a guisar sus alimentos, aunque también utilizan varios métodos de cocción como el asado, la fritura y el salteado.
- La tapa es esencialmente un pequeño plato que sirve de tentempié o aperitivo. En España hay una gran variedad de recetas de tapas, que adoptan cualquier forma, desde trozos de tortilla (pincho de tortilla), huevos estrellados, hasta pescado empanado (pescaíto frito).
- A diferencia del resto de sus homólogos occidentales, la comida española más importante y de mayor tamaño del día es el almuerzo. Normalmente consta de varios platos, el primero es un aperitivo (entrantes), normalmente en forma de ensalada, sopa o bocadillo. No es raro que se sirvan varias opciones en la mesa. Las opciones más populares son el gazpacho (sopa fría de verduras), el zarangollo (ensalada de huevos revueltos) y la escalivada (verduras a la parrilla).
- Pasando al primer plato, platos como la paella de marisco, el estofado de pollo y la urta a la roteña suelen ser opciones habituales. En cuanto a los postres, el flan y los churros con chocolate son muy apreciados para terminar la comida con un toque dulce.
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